Habría cogido alguna vez un hilván, incluso pudo haber jugado a colocar los alfileres de colores en el acerico, pero dicen que la genética es caprichosa y ella, como su padre, prefirió el caballo. Un corcel blanco que la llevó a vivir del cuento y olvidar los estudios. Además, ¿a quien le importa ya conocer el significado de huso o de rueca?
Me esperaba algo muy distinto al leer el título, pero me ha gustado igualmente. Y he de decir que aunque es una pena que se pierdan ciertas palabras por su falta de uso, confío en que de vez en cuando alguien las recupere.
ResponderEliminarUn abrazo.