Suspiró profundamente y recogió dos cubiertos, uno de ellos
incompleto. Buscó en la mesa, entre los pliegues del mantel, en los platos
sucios aún calientes, en el suelo, entre la piel ya casi fría de la mujer que le observaba sin
pestañear.
Con gesto de conformidad, asumió que, como cada noche, sería
incapaz de encontrar el cuchillo.
- Estás preciosa, le dijo.
No le extrañó que al llevarle a la cama, su pecho estuviera
erguido, como si en la espalda tuviera algo que le impidiera tumbarse cómodamente.
Sonrió. – Mira que todas sois iguales…
Fotografía de Chema Madoz
Ay el cuchillo que lo usa para lo que no debe. Muy misterioso tu micro. Me ha gustado, te deseo suerte para la próxima.
ResponderEliminarSi es que somos de costumbres y claro, cuando la costumbre es despistar las cosas... je je.
ResponderEliminarBeso en la piel.
Pies de Retales, hoy las dos nos hemos encaminado por lo trágico, a veces es inevitable.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho.
Besicos muchos.
Hola. Me ha parecido muy ocurrente y muy bien conducido. Juegas con ese cubierto desde el principio y al final le das la solución al misterio consiguiendo incluso una sonrisa. Suerte para el siguiente.
ResponderEliminarHola, Piel.
ResponderEliminarVaya con el marido... Me deja un poco perpleja ese déjà vu y esa mujer fría casi sin pestañear...
A mí no me huele a risas.
Bueno, muchísima suerte para otra semana.
Abrazos.
Pues fijate Piel, a mi me pasa como a Towanda, tu relato salpicado de misterio no me huele demasiado a risas, mas bien al contrario.
ResponderEliminarSi puedes sácanos de dudas.
Suerte para la próxima y un saludo.
A mí me ha gustado mucho Piel, lo veo muy cinematográfico. Me ha recordado un poco a Norman Bates, el de la película de Psicosis con esa sonrisa final que te hiela...
ResponderEliminarMisterioso y jugando totalmente con la sicopatía...lo dicho, a mí me ha gustado mucho.
En una de éstas, zassss a la radio!
;)
Lo malo es que esa amabilidad y amor no se la haya dado en vida. ¡Miserables!.
ResponderEliminarDuro y tan bien llevado que a muchos costará entender el verdadero final.
Besos de esperanza y solidaridad.
Confieso que soy uno de esos que dice Gloria a los que costará entender el verdadero final, torpeza mía seguro, pero me gusta el planteamiento y como discurre la narración, sien embargo, lo siento, no veo en donde desemboca este río.
ResponderEliminarUn beso Piel.
Creo que ese final....advierte del grave peligro que se avecina en el lecho conyugal. Me gusta el misterio con el que has bañado el ambiente en 100 palabras. Mira que es dificil hacer todo esto en tan corto espacio ¿verdad?
ResponderEliminarUn besazo y mucha suerte con el piano de cola en el huerto.
Estoy de acuerdo con las opiniones anteriores. Como suele suceder, todas tienen su parte de razón. No deja de ser un crudo asesinato, pero parece suavizado por la confianza conyugal, que le imprime un toque de humor negro. Interesante y logrado. Un saludo.
ResponderEliminar