miércoles, 4 de junio de 2014

Todos para uno

   Mucho me temo que vienen a rescatarme. Siempre fuimos capaces en ocasiones adversas. La debilidad se crece en territorio hostil si estamos unidos. Esa es la consigna.
   Aterrado aguardo su llegada en posición fetal, hecho un ovillo. Mis latidos se ajustan a la medida de sus pasos, al crujir de cristales rotos. No hay salida, se cerraron todas las puertas, tan sólo queda una ventana resquebrajada desde la que me observa Sor Pilar, balón en mano.

-         He sido yo, grita Guillermo, y yo, le acompaña el buenazo de Martínez, y yo, afirma Luisa con las coletas bien tiesas.

La humedad de mis pantalones me delata.


13 comentarios:

  1. Muy buena esa amistad a lo Espartaco . Va de menos a más. Me ha gustado mucho Piel.
    Yo no sé cómo tiene que ser para ganar de verdad o por lo menos para estar seleccionado, en fin....
    Suerte la próxima! :)

    ResponderEliminar
  2. Jajaja pobreee muy buena escena descrita me encanta la solidaridad de los chavales, son buena gente y es un valor a promover y túlpo haces con tu relato, me encanta.

    ResponderEliminar
  3. Has dibujado perfectamente la amistad verdadera.
    Un saludo

    ResponderEliminar
  4. Ambiente de intriga muy bien creado y magnífico remate de cierre.
    Enhorabuena.

    ResponderEliminar
  5. Que bonito ese espíritu, y que escena tan de siempre, descrita con un buen suspense. Un beso de cristales.

    ResponderEliminar
  6. Sé que soy un pesado por decirte esto pero es culpa tuya: pero qué buena que eres en negro !!. El relato es perfecto por transcurso y atmósfera. Y el final es de colofón. Me gusta mucho Piel. Mucha suerte :)

    ResponderEliminar
  7. Sor Pilar seguro que los castiga a todos sin miramientos, menudas son las Sor Pilar. No obstante les honra el gesto de camaradería. Ese grupo durará toda la vida.

    Un beso en la Piel.

    ResponderEliminar
  8. Aquí prevalece la solidaridad por encima del miedo. Me gusta.
    Saludos.

    ResponderEliminar
  9. Nos has llevado al cole de nuevo, a esperar un castigo seguramente mucho mas duro que la falta.
    abrazos

    ResponderEliminar
  10. Hola, Piel.

    Es un valor que se está perdiendo, pero tú en esta historia nos haces volver a creer en la amistad y en la solidaridad y la camaradería con los compañeros.
    Me gusta mucho el título y la sorpresa final.

    Un besabrazo y lo seguimos intentando para la próxima.

    ResponderEliminar
  11. Felicidades por el relato Piel. Has dibujado un clima de tensión perfecto con un texto bien trabajado. La amistada inquebrantable y el miedo materializado en esa humedad dan mucho valor a tu texto.

    Buen trabajo. Saludos.

    ResponderEliminar
  12. Enhorabuena, le has sacado buen partido a la frase. Hoy en día de ha perdido el compañerismo en los niños, y ya de los adultos ni hablamos.
    Es una pena pero es la realidad.
    Saludos

    ResponderEliminar